Sitios en el Microcentro, Buenos Aires
Sitios a Visitar en el Microcentro de la Ciudad de Buenos Aires, Argentina
Palacio de Gobierno de Buenos Aires
Sorprendiendo con una combinación de estilos que reúne a la arquitectura francesa, italiana, y alemana, el edificio del Palacio de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires invita a disfrutar de una construcción que data de 1902 y se encuentra en perfecto estado de conservación.
Un proyecto del arquitecto Juan Buschiazzo, que fue ejecutado por el italiano Giovanni Cagnoni, se alza imponente sobre la Avenida de Mayo.
Además de su belleza arquitectónica, en su interior el visitante se encontrará con dos obras magníficas: “Preparativos de salida”, de Benito Quinquela Martín, y “La Fundación de Buenos Aires”, de José Moreno Carbonero.

Palacio de la Ciudad, Microcentro de la Ciudad de Buenos Aires
Plaza de Mayo
Politizada y fuertemente marcada por las huellas de la historia, Plaza de Mayo ha sido testigo y escenario de numerosos acontecimientos en la vida nacional: allí se grito la independencia en 1810; allí se juró públicamente la Constitución en 1860; allí las madres y abuelas golpearon con su lucha a la dictadura militar; allí se congregaban los ciudadanos cada vez que necesitaban hacer oír sus voces, y allí se siguen congregando.
Plaza de Mayo abarca una manzana, se encuentra rodeada por los principales edificios públicos, y luce en su centro la Pirámide de Mayo: un monumento al Centenario de la Revolución, construido en 1811 y modificado numerosas veces, que se conforma por una estructura, cuya estatua situada sobre la cúspide representa la libertad.
Tras numerosos cambios, finalmente la plaza recibió el exquisito trabajo de parquizado del paisajista francés Carlos Thays, con palmeras provenientes de Río de Janeiro.
Hermoso espacio verde salpicado de historia y política, la Plaza de Mayo no puede pasar desapercibida para ningún turista de Capital Federal, Buenos Aires.
Enmarcada por calles Hipólito Irigoyen, Balcarce, Bolívar y Rivadavia (Bº Monserrat).

Plaza de Mayo, Microcentro de la Ciudad de Buenos Aires
Peatonal Florida
Con una arquitectura que conserva rasgos del Siglo XVIII, Florida extiende su decena de cuadras peatonales sumando su atractivo al de la cercana Plaza San Martín.
Comercial, dinámica, encantadora, calle Florida se compone de negocios de los más variados estilos; majestuosas galerías que atraen a personas de todas las edades; acogedores y refinados salones de te, y encantadores cafés, donde el murmullo domina constantemente el ambiente; e interesantes centros culturales en los que el arte invade a los espectadores satisfaciendo las expectativas. Ideal para un recorrido en cualquier día de la semana, pero especialmente los sábados.
Arlt y Borges hablaron de ella, y no hay visitante de Buenos Aires que no desee acercarse a conocerla y sentir sus vibraciones en propia piel.
Se encuentra en el Barrio de Retiro, bordeando la Plaza San Martín en forma paralela a Maipú.

Peatonal Florida, Microcentro de la Ciudad de Buenos Aires
Pirámide de Mayo
Uno de los primeros monumentos que se construyeron en la Ciudad de Buenos Aires, la Pirámide de Mayo se ubica en la plaza homónima y se eleva 18 metros.
Construida para celebrar el primer año de la Revolución de Mayo, en sus orígenes fue sólo una pirámide pero con el paso del tiempo fue modificada.
En 1856 se agregó en su cúspide una estatua que representa a la República y en su base se colocaron escultoras alegóricas que representan a la agricultura, el comercio, las ciencias y las artes.
En 1912 se trasladó 60 metros dentro de la misma plaza.

Piramide, Microcentro de la Ciudad de Buenos Aires
Manzana de las Luces
Denominada así por haber sido en varios sentidos residencia de los intelectuales argentinos, toda la manzana ha sido declarada Monumento Histórico Nacional. En ella se destacan varios establecimientos de importancia significativa para el desarrollo intelectual y cultural del país en su etapa de despertar, así como construcciones pertenecientes a diversas épocas y estilos arquitectónicos.
Procuraduría de las Misiones; casas virreinales de renta; Colegio Nacional de Buenos Aires; Mercado de artesanías; Iglesia de San Ignacio; son algunos de los sitios que pueden visitarse, recorrerse y conocerse en las inmediaciones de la Manzana de las Luces, dejándose invadir por la seriedad y las ansias de estudio que antiguamente dominaban el ambiente.
También pueden realizarse visitas guiadas a los túneles que atraviesan el área desde tiempos antiguos, conectando subterráneamente a determinados edificios.

Manzana de las Luces, Microcentro de la Ciudad de Buenos Aires
Monumento a San Martín
Imponente, reluciente, y emplazado en la Plaza San Martín, el Monumento a San Martín fue uno de los primeros en mostrar al General junto a su caballo.
El homenaje al padre de la patria fue realizado en etapas: en 1862 el escultor francés Louis Joseph Daumas le dio forma al primer monumento ecuestre del país.
Varios años después, en 1910, se le adicionaron cuatro esculturas en sus laterales que representan La Partida; La Batalla; La Victoria; y El Regreso. Estas obras fueron desarrolladas por el alemán Gustavo Eberlein.
Realizado en bronce y granito rojo, se completa con referencias a las batallas más importante del libertador: San Lorenzo, Maipú, y Chacabuco; y otros relieves que recuerdan el Paso de los Andes, la Proclamación de la Independencia del Perú, la Batalla de Salta y la Toma de Montevideo.

Monumento a San Martin, Microcentro de la Ciudad de Buenos Aires
Casa Rosada
Ocupando un espacio con historia desde que Juan de Garay llegara a estas tierras, la Casa Rosada es la sede del gobierno nacional y un emblema para la nación.
Siendo una construcción amurallada que funcionaba como fuerte a comienzos del siglo XVIII, fue la sede de los gobiernos patrios desde 1810. Luego la construcción estuvo desocupada durante algunas décadas, y en 1862 Mitre se instaló junto a sus ministros en la antigua casa.
El siguiente presidente, Domingo F, Sarmiento, fue quien decidió pintarla de rosado, tradición que se mantiene hasta nuestros días. El edificio actual fue construido por orden del presidente Julio A. Roca, ubicado frente a la Plaza de Mayo. Fue inaugurado en 1884.
Uno de los recorridos imperdibles incluye un paseo por el Museo de la Casa Rosada: allí se pueden encontrar objetos personales y oficiales que pertenecieron a los presidentes de la República. Sillones, bastones y bandas presidenciales conforman el tesoro más preciado. Además en las galerías se pueden admirar antiguos y fastuosos carruajes.

Casa Rosada, Microcentro de la Ciudad de Buenos Aires
El Obelisco
Postal de la Capital, símbolo de Buenos Aires, Monumento Histórico Nacional, referencia obligada el Obelisco se alza con sus 67 metros en el mismísimo centro de la ciudad, permitiendo una mirada panorámica incomparable.
Inaugurada en 1936, en conmemoración al cuarto centenario de la primera instalación española en el Río de La Plata, esta obra imponente contó con el diseño del arquitecto Alberto Prebisch, y fue instalada justamente en el espacio bonaerense donde por primera vez flameó la Bandera Argentina, actual Plaza de la República.
Con una apariencia externa que provoca la sensación de rectitud y sencillez, el Obelisco presenta un interior hueco, sólo ocupado por una escalera recta y sin baranda -de 202 peldaños de hierro- que conduce hacia la cúspide invitando a descubrir Buenos Aires desde alguna de sus cuatro ventanas.
Punto de encuentro y festejos que se ha tornado tradicional, el Obelisco se sitúa en el cruce de Avenida 9 de Julio, Diagonal Norte y Avenida Corrientes (Bº San Nicolás).

El Obelisco, Microcentro de la Ciudad de Buenos Aires
Avenida Corrientes
Recordando las charlas interminables que reunían a la bohemia y a la intelectualidad porteña de comienzos del siglo XX, junto a las míticas tanguerías que hacían sonar la música ciudadana, la Avenida Corrientes actualmente es visitada asiduamente por quienes gustan de los espectáculos y la movida nocturna.
Conocida como la avenida que nunca duerme, permite visitar numerosos teatros; cines; restaurantes; cafés; y librerías, conformando una cartelera completísima e irresistible.
En su encuentro con la Avenida 9 de Julio permite admirar el fastuoso Obelisco, emblema de la ciudad.

Avenida Corrientes, Microcentro de la Ciudad de Buenos Aires
Teatro Colón
Imponente, majestuoso y resplandeciente, el Teatro Colón es uno de los símbolos indiscutibles de esta ciudad. Reconocido como uno de los más importantes en América Latina y comparado con La Scala de Milán, La Ópera de París y el Bolshoi de Moscú por su descomunal acústica, ha recibido a importantes artistas que lo eligen para presentar sus espectáculos.
Ocupando desde 1908 un edificio con una fachada de estilo renacentista italiano, su interior continua sorprendiendo con mármoles de Verona y escalinatas que permiten recorrerlo.
La sala principal se completa con 2478 butacas y se divide en siete niveles para la comodidad de todos los espectadores. Cuenta con una cúpula en la que aprecia una pintura de Raúl Soldi; un foso de orquesta con capacidad para 120 músicos, y un escenario con un disco giratorio que permite el rápido cambio de la escenografía.
En el lugar también se encuentra un Instituto de Artes; se dictan cursos y talleres; y se puede contratar una visita guiada para no perderse ningún detalle de esta edificación atrapante.

Teatro Colón, Microcentro de la Ciudad de Buenos Aires
Avenidas de San Nicolás
Av. 9 de Julio: destacada por ser una de las más anchas del mundo (mide 140mts.), esta avenida comprende 25 cuadras hacia el norte y otras 25 hacia el sur del Obelisco. Llevando como nombre una importante fecha de la Historia Argentina, la 9 de Julio exigió la demolición de numerosas manzanas a principios del Siglo XX para comenzar a circular por Buenos Aires.
Hoy puede vérsela grandiosa y hermosamente forestada con especies como jacarandá y palo borracho.
Av. Corrientes: escenario y protagonista del espectáculo y la movida nocturna, esta avenida concentra todo el brillo de la ciudad en su extensión. En 1936, año de inauguración del Obelisco, Corrientes fue ensanchada instalándose a su vera restoranes, cafés, librerías, cines, teatros y otros tantos complejos donde disfrutar de las más atrapantes obras nacionales y extranjeras. En la intersección de ambas avenidas se alza imponente el símbolo máximo de Buenos Aires el Obelisco, convirtiendo este espacio en el centro del centro.

San Nicolas, Microcentro de la Ciudad de Buenos Aires
Catedral Metropolitana
Imponente con sus 12 columnas en su fachada, la Catedral Metropolitana es uno de los templos de referencia para todos los católicos de Argentina. Ubicándose dentro de las edificaciones de estilo neoclásico, no cuenta con campanarios ni torres laterales como la mayoría de los templos católicos.
El edificio actual fue culminado completamente en 1911, pero desde 1539 en este lugar se fueron sucediendo varias edificaciones que cumplían la misma función.
Su interior se divide en cinco naves. En la principal se puede apreciar el imponente altar mayor.
Si el visitante recorre la nave lateral derecha podrá acceder al Mausoleo, que alberga los restos del padre de la patria, José de San Martín. En la parte izquierda se ubica un altar consagrado al “Santo Cristo de Buenos Aires”: resulta sorprendente la imagen de Jesús crucificado en tamaño natural y tallado en madera que preside el espacio.

Catedral, Microcentro de la Ciudad de Buenos Aires
El Cabildo
Testimonio de hechos históricos que marcaron la vida de la nación, El Cabildo es una de las construcciones más emblemáticas de Buenos Aires.
El edificio actual data de 1711, y fue construido bajo el proyecto del jesuita Andrea Blanqui. Fue inaugurado en 1740 cuando todavía no estaba concluido.
Recién quedó finalizado en 1748, con un balcón en el frente; cinco arcos en cada ala lateral; una torre con reloj y campanas.
Luego de ser sede del gobierno nacional y testimonio de la aclamada Revolución de Mayo, sufrió varias modificaciones hasta que tomó su fisonomía actual: en 1884 perdió tres arcos del lateral norte debido al trazado de la Avenida de Mayo; en 1931, el delineado de la Avenida Presidente Julio A. Roca obligó a demoler los tres arcos de la parte sur.
En 1933 fue declarado Monumento Histórico, y refaccionado tratando de respetar lo que era su aspecto original.

Cabildo, Microcentro de la Ciudad de Buenos Aires
Edificio Kavanagh
Si transita por la calle Florida, uno de los lugares imperdibles para admirar es el Edificio Kavanagh. Ubicado frente a la Plaza San Martín, sorprende con su estructura escalonada que alcanza los 120 metros de altura, y se reparten en 32 pisos y 105 departamentos.
Fue construido en 1934 a pedido de la millonaria Corina Kavanagh. Para esa época fue el edificio más alto de Latinoamérica y la mayor construcción de hormigón armado en el mundo.
Su estilo racionalista, de líneas puras, y colores blanquecinos lo hacen diferente y encantador. Debido a su peculiaridad fue declarado Patrimonio Mundial de la Arquitectura de la Modernidad por la UNESCO en 1999.

Kavanagh, Microcentro de la Ciudad de Buenos Aires
Monumento a los Dos Congresos
Realizado con motivo de la Celebración del Centenario de la Revolución de Mayo, el Monumento a Los Dos Congresos se alza imponente frente al Congreso Nacional.
Una obra del arquitecto belga Eugenio D' Huicque y el escultor Jules Lagae, está conformado por varios grupos escultóricos, entre los que se destacan uno que representa la Asamblea Nacional de 1813 y otro al Congreso de 1816.
Sobre una plataforma que se eleva unos cuatro metros, la obra se completa con una alegoría de la República Argentina; figuras de bronce que representan a cóndores y ángeles; junto a pilares en las cuatro esquinas.
Hacía el este se extiende una fuente que remata este imponente monumento.

Monumento a los dos Congresos, Microcentro de la Ciudad de Buenos Aires
Avenida 9 de Julio
Uniendo el norte y el sur de la Ciudad de Buenos Aires, la Avenida 9 de Julio ya es una de las marcas registradas de este conglomerado urbano. Inaugurada en 1937, fue concebida como una avenida parque que necesito demoler cinco manzanas para su concreción.
Una de las más anchas del mundo, en la actualidad con 140 metros, ha sufrido varias modificaciones a lo largo del tiempo que le quitaron o brindaron mayor superficie.
En su recorrido atraviesa otro de los símbolos indiscutibles, el imponente Obelisco que se ubica en la rotonda. Reverdecida con jacarandás, ceibos, y cerezos, la parquización original estuvo a cargo del reconocido paisajista Carlos Thays.

Avenida 9 de Julio, Microcentro de la Ciudad de Buenos Aires
Museo Nacional de la Inmigración
Emplazado en el antiguo Hotel de Inmigrantes, el Museo Nacional de la Inmigración invita a retrotraerse en el tiempo y sumergirse en un mundo que refleja el espíritu de esos extranjeros que llegaron al país con un cúmulo se sueños.
Este lugar fue la primera parada de los inmigrantes que arribaban a Buenos Aires, entre 1882 y 1929.
Un recorrido por sus salas permite apreciar los registros que se llevaban de las personas que ingresaban al país; objetos personales como valijas; muestras fotográficas que representan esa época de la historia argentina.
También cuenta con una biblioteca especializada en el tema.
El Museo fue creado por el Ministerio del Interior en 1997 y fue declarado Monumento Histórico Nacional del Inmueble.

Bar los 36 Billares
Un proyecto de los arquitectos Tiphaine y Colmegna, el Bar Los 36 Billares es uno de esos lugares porteños testigos del paso del tiempo. Inaugurado en 1894, es uno de los lugares más emblemáticos para quienes gusten de la práctica del billar.
Con farolas en el frente que recuerdan sus orígenes, su interior cuenta con dos salones para disfrutar del café, mientras que en el subsuelo se dictan clases de esta particular disciplina que atrapa a lugareños y visitantes.

Galería Güemes
Una obra del arquitecto italiano Francisco Gianotti, la Galería Güemes invita a descubrir una fascinante construcción que representa la magia del Art Noveau en Buenos Aires.
El primer rascacielos de la ciudad, hacia 1915, se eleva 14 pisos y conforma un edificio-pasaje entre las calles Florida y San Martín. Fue encargado por los millonarios salteños San Miguel y David Ovejero.
Para la época fue una edificación que sorprendía a todos los transeúntes con sus ascensores, el sistema de alarmas de incendio, la calefacción y la refrigeración, junto a una especial iluminación y detalles imponentes en bronce. Todo en su conjunto lo transformaban en un adelanto para comienzos del siglo XX.
Además contaba con restaurantes, teatro y cabaret.
En la actualidad es un shopping que atrae a numerosos lugareños y visitantes. En el año 2000 fue declarada Sitio de Interés Cultural por la Legislatura de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

Iglesia de la Piedad
Emplazada en una esquina del barrio de San Nicolás, la Iglesia de la Piedad sorprende con su encantadora arquitectura en excelente estado de conservación.
El templo fue inaugurado en 1895, pero en el lugar ya se celebraban oficios religiosos desde 1752, en un pequeño oratorio.
El estilo neoclásico domina la fachada de la Iglesia, exponiendo dos torres laterales y columnas en el pórtico que rematan con una escultura que representa el momento en que Jesús es bajado de la cruz, acompañado por los ángeles.
En su interior se puede apreciar una imagen que es una réplica exacta de la que se encuentra en la ciudad italiana de Siena.
Completa el encanto de esta región, el Pasaje de la Piedad que se ubica al frente: este sendero con forma de U permite apreciar una combinación fascinante de arquitectura francesa e italiana junto a una sala teatral.

Museo Mundial del Tango
Mezclando la pasión y el encanto que despierta la música ciudadana, el Museo Nacional del Tango es un lugar imperdibles para quienes gusten de descubrir una parte importante de la historia porteña.
Emplazado en el Palacio Carlos Gardel, fue inaugurado en 2003 para recuperar la inconmensurable vida que este ritmo desarrolla a orillas del Río de la Plata.
Dentro de sus piezas se destacan instrumentos musicales, vestimentas que pertenecieron a grandes artistas, fotografías, colecciones de discos, entre muchos tesoros más.
El Museo propone varios recorridos: un paseo por la historia del Tango, desde 1850 hasta la actualidad; una visita al Olimpo de las Glorias, dónde se rinde un homenaje a los creadores del Tango; y un espectáculo de imagen y sonido que representa las diferentes épocas de esta melodía. Además se puede disfrutar de espectáculos que combinan la danza y el canto.

Palacio Barolo
Colmado de misticismo, encanto, y una arquitectura más que atrapante, el Palacio Barolo se alza sobre la Avenida de Mayo e invita a realizar un paseo fascinante.
Fue inaugurado en 1923 y por esa época era el edificio más alto de la ciudad, ya que superaba los cien metros.
El arquitecto italiano Mario Palanti fue el creador de esta construcción que culmina con un faro y sobre su techo muestra una cúpula de 16 metros.
Su dueño, Barolo, era admirador de la obra de Dante Alighieri, por ello tiene detalles que remiten a la obra de este artista: el palacio se divide en Infierno Purgatorio y Cielo; tiene inscripciones en latín; se eleva cien metros, y cien eran los cantos de la Divina Comedia…todo tiene un porque y una referencia a este poeta italiano y su producción.
En la actualidad se encuentra ocupado por oficinas.

Palacio Barolo, Microcentro de la Ciudad de Buenos Aires
Museo Judío de Buenos Aires "Dr. Salvador Kibrick"
Reuniendo gran parte de la historia de la comunidad judía, el Museo "Dr. Salvador Kibrick" pertenece a la Congregación Israelita de la Republica Argentina y fue inaugurado en 1967 por iniciativa del Dr. Salvador Kibrick. Este abogado fue quién donó gran parte de las pieza que atesora este sitio; más tarde se fueron agregando más objetos recibidos de otros miembros de la comunidad.
En la actualidad se pueden encontrar elementos utilizados en las ceremonias, como candelabros sabáticos; receptáculos de especies aromáticas; manteles de terciopelo; Torá marroquí, y la copa de Eliahu para vino ritual. Además, el visitante podrá admirar documentación que registra el arribo de inmigrantes judíos a la Argentina; y una muestra de arte numismática.
Se ofrecen visitas guiadas que también invitan a conocer la sinagoga.

Torre Monumental
Espacio en el que confluye la historia y la cultura, la Torre Monumental es otra de las sorpresas que el barrio de Retiro tiene preparadas para su visitante.
También conocida como la Torre de los Ingleses, fue donada al país por la colectividad Británica en ocasión del Centenario de la Revolución de Mayo.
Elevándose hacia el cielo con el estilo de las construcciones sajonas, en su sexto piso cuenta con un mirador que permite obtener espectaculares vistas panorámicas de la ciudad.
Desde 2001 allí funciona el Centro de Informes de Museos, un lugar obligado para el turista que quiera conocer el acervo museológico de la región.

Torre de los Ingleses, Microcentro de la Ciudad de Buenos Aires
Basílica del Santísimo Rosario y Convento de Santo
Testimonio del paso del tiempo, la fe, y el espíritu religioso, la Basílica del Santísimo Rosario es una antigua construcción que data de 1751 y aún conserva sus líneas originales.
Su fachada deja ver tres arcos sobre las que se eleva un ventanal con un pequeño balcón; el centro frontal del techo está marcado por una cruz de metal, mientras que los laterales aparecen flanqueados por dos torres que se elevan paralelas.
El espacio del interior está dividido en tres naves y alberga muchos testimonios de los siglos pasados.
En el atrio se destaca el mausoleo que cobija los restos del General Manuel Belgrano.

Museo de la Ciudad
Creado en 1968 para rememorar la historia de Buenos Aires, el Museo de la Ciudad es uno de los sitios imperdibles para los visitantes que ansían conocer el pasado porteño.
Una invitación fascinante al pasado, permite descubrir un sinfín de piezas y objetos que permiten reconstruir la vida cotidiana de los antiguos habitantes: tarjetas, postales, fotografías, muebles, utensilios domésticos, juguetes, son sólo algunos de los tesoros que cobija.
Su ubicación privilegiada, cercana a la Plaza de Mayo, el Cabildo, la Casa de Gobierno, el edificio del Gobierno de la Ciudad, lo incluyen dentro de un circuito turístico atrapante y más que llamativo.
Entre las actividades que organiza el Museo de la Ciudad se encuentra la organización de la Feria de San Pedro Telmo, en la Plaza Dorrego; la Feria de las Artes, en la Plazoleta San Francisco; junto a otras ferias temporales de libros, metales y ropa.

Catedral Anglicana San Juan Bautista
Naciendo a partir de la necesidad de la comunidad de inmigrantes ingleses que llegaron al país a comienzos del siglo XIX, la Catedral Anglicana San Juan Bautista invita a deleitarse con un imponente edificio que data de 1831.
Declarado Monumento Histórico Nacional en el año 2000, su arquitectura permite apreciar la fachada original de la Catedral y un interior que sorprende con imponentes vitrales y columnas que pueden identificarse con el estilo victoriano.
Actualmente reúne a fieles de diversos orígenes y es uno de los sitios imperdibles para los visitantes ingleses.

Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires
Un edificio colmado de historia y por el cual pasaron ilustre visitantes y personalidades de nuestro país, la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires también amerita una visita si transita por el barrio de Monserrat.
Con un estilo academicista francés, fue diseñado por el arquitecto Héctor Ayerza e inaugurado en 1931.
Ubicado en una esquina, y respetando una forma con base triangular, su fachada tiene columnatas; balcones; arcos; y en el último de los siete pisos, un grupo de 26 esculturas que lo rodean.
Una torre con reloj, ubicada sobre uno de los laterales, sobresale sobre el techo de la construcción y brinda la hora oficial. En esa torre también se encuentran un grupo de 30 campanas. En 2008 fue declarado Monumento Histórico de la Ciudad de Buenos Aires.

Iglesia San Ignacio
Ostentando ser una de las Iglesias más antiguas de Buenos Aires, la Iglesia de San Ignacio invita a descubrir una fachada barroca con dos torres laterales simétricas, que tuvo sus orígenes alrededor de 1675. Con el paso del tiempo fue restaurada y sufrió en 1955 un incendio intencional.
En su interior se pueden admirar pinturas, imágenes, amoblamiento, y otras piezas que datan del siglo XVIII.

Casa de la Cultura (ex Diario La Prensa)
Construido originalmente para albergar la sede del diario La Prensa, el edificio que ocupa actualmente la Casa de la Cultura fue inaugurado en 1898 y fue autoría de los arquitectos Hainza y Agote.
Reflejando el estilo academicista francés, su fachada tiene rasgos de otras esplendorosas construcciones como Opera de París y el Casino de Montecarlo.
Una cúpula corona su techo y por encima una escultura denominada “La Farola”, representa la libertad de expresión.
En su interior, el Salón Dorado es uno de sus tesoros más preciados: con tapices traídos de Francia; majestuosas tallas doradas; un juego de espejos único; un balcón para orquesta; un escenario con todo lo necesario para disfrutar de un espectáculo; se impone como uno de los auditorios más pintorescos de la ciudad.
En el lugar se puede disfrutar de talleres de música y danza, conferencias y congresos, visitas guiadas, entre muchas propuestas más.