San Miguel del Monte es una tranquila ciudad del noreste bonaerense que resguarda su identidad de la mano de un
Museo, un rancho que perteneciera a Juan Manuel de Rosas, la
Parroquia San Miguel Arcángel y el lugar en el que se ubicó el primer
fortín de la pampa.
Además de este fascinante circuito, el
Paseo de los Artesanos es otra muestra de su cultura. Ubicado sobre la explanada municipal y la Plaza Adolfo Alsina, expone las obras de arte realizadas por las manos lugareñas. Tallados en madera y hueso; vasijas de cerámica; vidrios grabados y tejidos son algunas de las maravillas que nacen de los hijos de esta localidad.
La lindante
Laguna del Monte se ofrece para la práctica de deportes náuticos. Las tranquilas aguas se ven agitadas por el
windsurf, jet sky, remo, motonáutica, velerismo y la
natación. En la época estival se desarrollan torneos y competencias que convocan a los apasionados de estas actividades. La
pesca es otra de sus posibilidades, tentando a los pescadores con sus
pejerreyes y
carpas.
Las fértiles tierras que rodean San Miguel del Monte están pobladas por antiguas
estancias que se brindan al visitante en una completa opción de
Turismo Rural. Spa, canchas de tenis y piscinas se combinan con cabalgatas y paseos, dando como resultado un inigualable relax rural.